Los principales riesgos se asocian a incendios, al contacto con sustancias químicas o caídas

Los empleados de las estaciones de servicio se exponen a algunos riesgos que hay que contemplar a la hora de establecer un protocolo de prevención de riesgos laborales.

Todos los riesgos se pueden prevenir y están diferenciados en diversas tipologías que detallamos a continuación:

  • Riesgos asociados a caídas. La mayoría de accidentes se pueden producir como consecuencia de la falta de limpieza y orden en el lugar de trabajo. Es por ello que se debe concienciar al personal que se debe mantener en orden las zonas comunes atendiendo a aspectos como eliminar papeles, desperdicios y obstáculos contra los que se pueda tropezar, mantener los accesos bien iluminados, limpiar los líquidos en caso de derrame, mantener los desagües limpios, o disponer de calzado antideslizante. En el caso de que los trabajadores tengan que acceder a partes altas en una gasolinera, se deberán utilizar los medios adecuados, como escaleras de mano y no otros objetos inapropiados como sillas o papeleras.
  • Riesgos asociados al tráfico. Nos estamos refiriendo a atropellos, choques o golpes con vehículos. Para evitarlos, los empleados deberán usar ropa de alta visibilidad, respetar la distancia con los vehículos o asegurarse que en la zona de paso de los coches haya una iluminación adecuada, entre otras medidas.
  • Riesgos asociados al contacto con productos o sustancias químicas a los que se exponen diariamente los trabajadores de las gasolineras. La inhalación de una concentración dañina de vapores de gasolina y gasóleo durante períodos de tiempo prolongados, puede causar intoxicaciones leves e incluso afecciones más graves. Pero también una exposición breve a concentraciones elevadas puede provocar mareos, cefaleas y náuseas. Es por ello que las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia deben evitar desempeñar tareas que presenten riesgo directo de exposición a estos productos.
  • Riesgos asociados al contacto eléctrico. Aunque no existe un riesgo de manera directa, sí que hay riesgo con la electricidad estática, un tipo de electricidad que no se ve pero que puede generar accidentes graves. En consecuencia, es importante tomar algunas medidas de protección como que la ropa de trabajo no genere carga electro estática, utilizar equipos de protección EPIS que ayuden a no generar carga eléctrica, disponer de puesta a tierra de todos los equipos de la estación de servicio, revisar que la instalación esté ejecutada de acuerdo a la reglamentación vigente o comprobar que el aislamiento de los cables eléctricos esté en perfecto estado.
  • Riesgos de incendios. Es uno de los puntos más importantes a tener en cuenta, puesto que los combustibles presentes en todas las estaciones de servicio implican un gran riesgo de incendio y de explosión. Para controlarlo, hay que garantizar una ventilación adecuada de los locales cerrados para conseguir disipar los vapores de gasolina y reducir la concentración de los mismos.

Además de los de arriba expuestos, existen otros riesgos asociados a factores como la exposición al ruido, a la carga física o mental, etc.