Alvic forma parte de un consorcio internacional para trabajar conjuntamente en la implantación de una economía del hidrógeno en Barcelona con la iniciativa Hydrogenizing BCN. El Port de Barcelona fue identificado como el lugar ideal para desarrollar una estrategia a largo plazo basada en hidrógeno verde. Alvic participa en los avances de la transición energética y los cambios en la movilidad, adaptando sus productos y servicios a nuevas fuentes energéticas, como la electricidad, el gas y el hidrógeno.

¿Por qué el hidrógeno? El hidrógeno verde tiene el potencial de acelerar significativamente la descarbonización de varios sectores, incluido el transporte pesado, las actividades portuarias y marítimas, la movilidad general en el área metropolitana, así como reemplazar el hidrógeno gris en la industria y disminuir el contenido de carbono de las redes de gas natural. Te explicamos los principales beneficios que traerá el desarrollo del hidrógeno renovable:

1. Eliminar las emisiones de contaminantes y de gases de efecto invernadero al medio ambiente en sectores o procesos difícilmente descarbonizables, para alcanzar los objetivos de una economía climáticamente neutra en 2050.

2. Desarrollar las cadenas de valor de la economía del hidrógeno y posicionar a España como referente tecnológico. La economía del hidrógeno ha de estar impulsada y apoyada por el desarrollo de la cadena de valor industrial y energética asociada. Con el fomento de la innovación y del crecimiento de la industria se crean las condiciones propicias para la generación de riqueza y la creación de puestos altamente cualificados en cada etapa de la cadena de valor del hidrógeno renovable.

3. Permitir la penetración de un mayor porcentaje de energías renovables en el sistema eléctrico, propiciando un mayor grado de gestionabilidad. La intermitencia en la generación a partir de fuentes de energía renovables, supone un reto en la gestión de un sistema eléctrico cada vez más renovable. El hidrógeno renovable se posiciona como una solución para el almacenamiento de energía a gran escala y de manera estacional.

4. Disminuir la dependencia energética nacional y del entorno europeo. La producción de hidrógeno renovable autóctona permite operar un sistema energético menos dependiente de importaciones de productos energéticos fósiles de otros países y, por tanto, permitirá mejorar la balanza energética. Además, puede proporcionar la seguridad de suministro de la energía eléctrica cuando la producción instantánea de energía renovable es escasa.

5. Convertir a España en una de las potencias europeas de generación de energía renovable, debido a las ventajosas condiciones climáticas y grandes superficies libres para la instalación de plantas de producción de energía renovable, ya sea solar o eólica.

6. Favorecer la descarbonización de los sistemas energéticos aislados, con especial atención a los territorios insulares. Dadas las restricciones físicas y de acceso a la energía en estos territorios, el hidrógeno renovable tendrá una función relevante tanto en el almacenamiento temporal de energía eléctrica como en los usos relativos a la movilidad, favoreciendo que los territorios insulares alcancen la categoría de destinos turísticos sostenibles.

7. Potenciar la I+D+i energética española como pilar de crecimiento económico sostenible. La investigación, desarrollo e innovación pueden potenciar el liderazgo de las empresas e industrias españolas de la economía del hidrógeno, tanto tecnológico como en posibles soluciones a la gestión de cualquiera de las etapas de la cadena de valor del hidrógeno renovable.

Fuente | Hoja de ruta del Hidrógeno: Una apuesta por el hidrógeno renovable